33,3%

Así es, no sé cómo ni en qué minuto, pero ya se cumplió 1/3 del intercambio! 2 meses desde que llegué a Australia, 2 meses viviendo en mi flat, 2 meses lejos de Chile… creo que nunca había pasado tanto tiempo de corrido fuera de mi casa! Qué increíble, porque como ya dije por ahí, después de esa llegada un poco traumática a toda esta aventura, el tiempo se me ha pasado volando! No sólo se cumplió un tercio del intercambio, sino que también la mitad del semestre en UNSW. Y si estos primeros 2 meses se me pasaron así de rápido, los que vienen creo que pasarán aún más rápido. Mañana salgo a vacaciones, o ‘mid-semester break’ como le dicen por acá, por una semana. Me voy a New Zealand con 6 amigos, todos de intercambio igual que yo: Giulia y Jacopo (italianos), Kevin, Vanina y Laure (franceses) y Willem (holandés), team Europe en pleno! A la vuelta tengo las pruebas de mitad de semestre (‘mid-terms’) y el 23 de Abril llegan mis papás (paso el dato que mis padres son una muy confiable empresa de correo)! Vamos a pasar 3 días en Sydney y de ahí nos vamos a nuestro viaje en motorhome por la East Coast. O sea que no me voy a dar ni cuenta y el 33,3% ya será un 50%! Lo bueno es que lo tengo claro y por eso estoy tratando de sacarle el jugo a cada minuto.

Esta vez no tengo grandes hitos o viajes que describir y contarles, solamente varios eventos dispersos y algunas refelexiones acumuladas desde la última vez que escribí, así que voy a aplicar de nuevo el método de “punteo” de la otra vez:

- El otoño llegó a Sydney! Definitivamente la temperatura ha bajado considerablemente y el clima tropical de los primeros meses ha sido reemplazado por un clima mucho más parecido a Santiago en esta época; los plátanos orientales se han empezado a poner amarillos y ahora cuando me voy a la universidad en la mañana, voy aplastando hojas secas en el camino con mi bicicleta. Pensé que nunca iba a usar los chalecos y polerones que había traído, pero esta semana me han venido bastante bien. Es raro igual sentir frío, o al menos sentir que esté más helado en esta ciudad, ya me había acostumbrado al verano, la playa, el traje de baño y las hawaianas. La semana pasada por primera vez desde que llegué tuve que dormir con la ventana de mi pieza cerrada. En la calle aparecieron los abrigos, los impermeables, las botas y las bufandas… aunque mi teoría es que ésto es solamente porque el invierno es muy corto y poco crudo, por lo que los aussies sacan a lucir sus atuendos invernales apenas el termómetro baja de los 20°.

- Me fui un día a Maroubra, la playa urbana más al sur de Sydney, y que todavía no conocía, me arrendé una tabla, como todo un native aussie, y me tiré al agua dándomelas de surfer… la diferencia con los australianos de verdad era que ellos surfeaban mientras yo hacía el loco! Me conseguí un traje de agua con mi amigo australiano Nick, que conocí en las Blue Mountains y que, coincidence shit, es amigo de los flatmates de Lucy. Con respecto al surf, algo mejoré desde mi primer intento, pero me falta harta práctica todavía. En todo caso, es una sensación increíble cuando uno logra pararse, además el paseo a Maroubra valió la pena porque (ahora sí que sí… de verdad tíos, créanme…) era una playa muy diferente a las demás de Sydney, creo que por estar tan lejos del centro turístico, es una playa aussie de verdad (aunque mis groupies virtuales me digan que SIEMPRE digo eso, jaja).

- Mi amiga Jillian vino a comer a mi casa. Yo había quedado de invitarla para pagarle todos mis bolseos en el paseo a las BM, donde a mi se me olvidó llevar todo y sobreviví gracias a todo lo que ella me prestó/regaló. Jillian es un hit, es la versión femenina de ‘exchange dad’, porque ella está en UNSW haciendo un postgrado, es una arquitecta exitosa de Washington DC que decidió volver a la vida de estudiante y participar de todo lo que implica la vida del intercambio.

- Con Enzo, mi flatmate italiano (y con quien me entiendo mejor en italiano que en inglés), les hicimos una despedida a nuestras flatmates Giulia y Caroline, que eran las fundadoras de nuestra casa y que ya se volvían a sus países. Fuimos primero al Doncaster Pub (recomendado por Lucy) que queda al frente de mi casa, jugamos pool pero como era domingo cerraban temprano. Así que a la vuelta, Enzo propuso hacer una ‘spaghetatta’ en honor a las viajeras. Estuvo buenísima, todos lo pasamos muy bien, fue la primera vez que hacíamos alguna actividad en conjunto todos los flatmates y creo que a todos nos dio un poco de lata no habernos conocido mejor antes y haber hecho más cosas juntos.

- Ya tengo una rutina de estudiante universitario en Australia. Me pasa que ya me acostumbré a los horarios de estudio y a los horarios de turismo. Al principio me costaba hacerme la idea de que tenía que sacrificar una ida a la playa o una caminata por George Street por tener que hacer un journal o escribir un ensayo. Pero de a poco se me hizo una rutina, y ya tengo una metodología de trabajo para la universidad que hasta ahora he sabido compatibilizar bien con la vida de turista. De hecho, todas las semanas tengo algún trabajo que entregar, por lo que hay que estar siempre leyendo o haciendo algo. La diferencia con Chile es que acá uno igual hace cosas, entrega trabajos, estudia y lee para la universidad, pero la diferencia es que acá uno hace todo más relajado y motivado. Y lo que más me ha impresionado es que siendo en otro país, otro idioma, otra universidad, me ha ido mucho mejor que en Chile!! Igual he notado que los australianos se estresan y alegan por las mismas cosas en la universidad que nosotros en Chile, pero acá nadie se saca “rojos”, y nadie se echa los ramos! Es un sistema exigente pero con un enfoque mucho más dirigido a que los alumnos aprendan, sean críticos, se cuestionen problemas, y sepan discutirlos y resolverlos. Nada de fórmulas de memoria que se te olvidan al segundo de dar la prueba, nada de pruebas interminables hechas para que nadie las pueda resolver completas… acá les interesa que SÍ la puedas resolver, y para eso, nunca te van a tratar de “pillar” en la prueba.

- Las últimas semanas he caminado harto por Sydney, especialmente tratando de ir a lugares y barrios que no conocía. El otro día fui a conocer COFA (College of Fine Arts), el otro campus de mi universidad, que queda en el centro. Es mucho más chico que mi campus, de hecho me recordó mucho a Lo Contador, con su onda shuper loca y bien taquilla, sólo que en versión aussie. También fui a Surry Hills, un barrio más antiguo de Sydney plagado de ‘art galleries’ y cafés bien lounge, donde los sábados hacen una feria de anticuarios y ropa usada muy entretenida en uno de los parques.

- Llegaron nuevos flatmates a la casa en reemplazo de los que se han ido. Al parecer el landlord no les explicó bien las reglas de la casa, porque asumieron que “todo era de todos”, incluida la comida. Así que me pasó que varios días llegaba a la casa a querer cocinarme, y me encontraba con todas mis cuestiones usadas y sin lavar. Opté por seguir la “estrategia Enzo” y marqué mis cosas con plumón y puse un letrero en mi repisa de la cocina!

- Tuve un ‘field trip’ con mi ramo de Marine Environment al Sydney Aquarium. Yo ya había ido cuando llevaba como 3 dias en Sydney y estaba en mi peor momento de echar de menos, llovía, era de noche, no había nadie más que yo en el acuario y además me encontré con un guarén en el tanque de los tiburones… infierno en la tierra, así que fue entretenido ir de nuevo. Esta vez vi a otro hit de la fauna australiana, que a mi se me había olvidado que era de por estos lares: el ornitorrinco (‘platypus’)! Yo me los imaginaba del tamaño de un castor, pero no… son enanos, miden como 20 cm. de largo los más grandes! Me reí mucho con las Kellys y las Beckys de Georgia Tech gritando OMG MUM! con cada bicho que veían y tomando muuuuuuuuucho café en botellas Nalgene (Gus, son las mismas de montañismo) para despertar del carrete de la noche anterior.

- Me corté el pelo.

- Un australiano con el que conversaba mientras esperaba la micro me contó que Hugh Jackman y Nicole Kidman estudiaron teatro en la facultad de teatro de UNSW, que queda a 20 metros de mi casa… o sea que las celebridades australianas caminaban por mi calle Anzac Parade igual que yo todos los días.

- Ya no me parece raro que se maneje al lado izquierdo. De hecho, hasta me parece más lógico, así como que leemos de izquierda a derecha, se va por la izquierda, y se vuelve por la derecha… El otro día vimos una película en uno de mis ramos y aparecía un auto por el lado derecho de la calle y me parecció raro… jajaja, esto suena muy como algo tipo zamorano-se-va-po-un-mes-a-españa-y-habla-de-coño-tío pero es algo que me impresionó a mi mismo, como uno adquiere las costumbres de dónde está.

- Fui a un pub karaoke con algunos de los exchange en Newtown, un suburbio al oeste de Sydney, y me demoré 4 horas en llegar a mi casa a la vuelta. Como era día de semana no habían micros ni trenes, además llovía y un taxi era demasiado caro, así que caminamos como 20 kms. con Brandon y Willem hasta encontrar una micro. Hasta las más grandes “metrópolis” como Sydney (la “capital de Oceanía”) tienen problemas de transporte público, no estamos tan mal en Chilito.

- Me he hecho fanático de los lamb kebabs, los caramel slices, las Tim-Tams double coated, el butter chicken de los restoranes hindúes, los caramel koalas, los helados Cold Rock y cualquier cosa con macadamias! Todavía estoy tratando de aclimatar el paladar para el Vegemite.

- Parece que ya no parezco turista, porque ahora me está pasando que bien seguido me paran turistas a mi en la calle para preguntarme indicaciones… y lo mejor de todo es que ya puedo dárselas sin problemas.

- Los aussies se van a Fiji para Easter así como algunos chilenos se van a Mendoza. Antes de venir a Australia, para mi Fiji era “de otro planeta”, y resulta que acá es un destino muy pero muy común.

- Una de las cosas que más he aprendido en el intercambio es a aceptar y saber convivir con esa actitud de “siempre listo” y de saber que los planes que uno hace valen hongo… cada día te puede sorprender de una forma distinta y terminar haciendo lo completamente opuesto a lo que te habías propuesto, como el otro día: me levanté creyendo que tenía un día de water-ski por delante, y una comida en la noche con la hija de los amigos kiwis que voy a ir a ver en Auckland. Pero no, no… resulta que Willem decidió ir al paseo de water-ski a último minuto y cuando nos bajamos en la estación de Windsor, un pueblo perdido en la mitad del outback, donde nos estaba esperando ‘exchange dad’ en su 4x4 para llevarnos al lugar del ski, este último nos informó “amablemente” que no cabíamos los 2 en el auto y que no podía llevarnos… así que ahí estábamos, a las 10:30 de la mañana en un pueblo de no más de 20 personas, lo único que sabíamos era que estábamos cerca de las BM, así que decidimos irnos a pasar el día allá… y bueno, fue el hit! Nos fuimos a Katoomba (que no es la capital de Tanzania, sino la capital de las BM!), hicimos un trekking por las Three Sisters, un monumento natural de roca, y nos devolvimos en una especie de teleférico gigante que “volaba” por arriba de los cañones! Willem me había invitado esa noche a ver un show al Opera House porque uno de sus flatmates le había regalado 2 entradas… y yo le había tenido que decir que no porque tenía que juntarme con mi amiga de NZ que sólo estaba en Sydney por esa noche… pero Dunsmore’s Luck ahí estaba siempre presente y cuando veníamos en el tren de vuelta me llamó la Daniela para decirme que el jet lag la tenía semi-muerta y que no podría juntarse, así que cuando corté Willem me dice: ‘Are you still up for the Opera House show?’ Y a mi qué me han dicho! Ni siquiera me importaba qué show era, el sólo hecho de estar sentado en el Concert Hall del Opera House de Sydney (literalmente debajo del famosísimo techo de baldosas blancas) parecía irreal. Y bueno, como ya era la hora, no pudimos pasar a las casas y nos fuimos directo, en traje de baño y con pinta post-trekking por las BM, yo hasta iba con hawaianas… pero por suerte no nos hicieron ningún tipo de problemas y sin darme cuenta, estaba sentado ahí viendo un concierto de Rita. Para los que no la conocen (como yo antes de esto), Rita es la cantante más famosa de Israel y el hit de la colonia judía en Sydney (bastante numerosa, son dueños de un barrio completo). Esta mujer canta música tipo Celine Dion, pero en HEBREO! Y el público (elegantísimo, como si fueran a un matrimonio) cantaba las canciones de memoria! Fue una experiencia increíble, estar ahí en el Opera House viendo este concierto, con música buenísima (me encantó Rita), y sobretodo después del vuelco radical que había tenido el día que yo tenía planificado parecía como estar dentro de una película. Creo que ha sido uno de los momentos más espectaculares que he vivido en el intercambio =)

Parece que eso es todo por ahora. Pasado mañana parto a NZ y empieza un mes muy intenso dentro de esta (ya intensa) aventura, por lo que existe la posibilidad de que no pueda escribir de nuevo por un buen tiempo, pero prometo actualizarlos lo antes que pueda, o trataré de subir fotos desde los lugares donde esté.

Una vez más gracias y más gracias a todos mis groupies virtuales, ustedes saben quiénes son. Escribir de todo lo que esta experiencia significa para mi no tendría el mismo sentido que tiene si no fuera por todos sus comentarios y su compañía. Los quiero mucho a todos y me acuerdo de ustedes a cada rato!